Pero lo más importante para el equipo de Lopetegui ha sido que ha mantenido el bloque de la plantilla de la temporada pasada. La gran cruz para Guardiola sigue siendo su zaga y, para solventar sus males han llegado Aké y Rubén Dias, mientras que Ferran Torres ofrecerá variantes arriba para un Guardiola al que las lesiones le tienen asolada la zona de ataque. Con ellos, acompañados de las incorporaciones para este nuevo curso, el Sevilla ha puesto las bases para seguir creciendo y acercarse a los grandes.